Un insulto y un ataque para los que están sufriendo el drama de los desahucios y para todos aquellos que con su esfuerzo están intentando que este drama sea lo menos doloroso posible para aquellos que los están sufriendo. Y los están sufriendo «gracias» a la dejadez e impasividad de los políticos. Políticos de esta calaña deberían desaparece del escenario político por su indignidad, falta de ética y falta de moralidad. Lo que deberían hacer políticos como estos es dejar de cobrar un sueldo público y dimitir de sus cargos puesto que no están haciendo nada por resolver los problemas de los ciudadanos. Les estamos pagando para que insulten, mientan, engañen y manipulen. Insultan, mienten, engañan y manipulan para desviar la atención, para que no nos fijemos en el problema real: que hay gente expulsada de sus casas mientras los bancos se enriquecen con el dinero de los ciudadanos, que un gran número de políticos del Gobierno y del partido político del Gobierno están inmersos en casos de corrupción, que el Gobierno ha mentido a la ciudadanía desde el primer día que comenzó a gobernar el país incumpliendo punto por punto el programa electoral con el que se presentaron a las elecciones, que el Gobierno es incapaz de sacarnos de la crisis aunque prometieron hacerlo, que están desmantelando el estado del bienestar privatizando la sanidad y la educación públicas… Todo con tal de ocultar la incapacidad de un partido y de un Gobierno por arreglar los problemas que tanto acucian a la población.
Increible, impresentable e inaceptable. Absolutamente inaceptable. Es imposible creer en este tipo de políticos. Lo único que están consiguiendo es hacernos daño continuamente.
Cifuentes riza el rizo y vincula a la Plataforma de Afectados por la Hipoteca con ETA
La delegada del Gobierno en Madrid asegura que Ada Colau «apoya a grupos proetarras como Bildu» y, por tanto, según ella, las acciones de la PAH para frenar los desahucios son como la «kale borroka»
Después de que María Dolores de Cospedal acusara a PSOE e Izquierda Unida de «inculcar agresividad» y «violencia» a los jóvenes españoles, ha tomado la palabra la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, que, como viene siendo habitual, no ha dado rodeos y ha atacado directamente a los movimientos sociales como la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) que lidera Ada Colau. Según ella, Colau apoya a grupos «proetarras» y ha calificado las acciones contra los desahucios de «kale borroka».
«Ada Colau y las personas que están la plataforma anti desahucios han manifestado su apoyo, en determinadas ocasiones, a Bildu, a Sortu y a esos grupos que a mi modo de ver y el de muchos españoles tienen que ver con el entorno de ETA», ha asegurado, en una entrevista en Radio Nacional. De este modo, la delegada del Gobierno, mezclando conceptos hasta límites insospechados, ha dicho que la PAH lleva a cabo «una estrategia política radical» con intereses políticos oscuros detrás usando «la violencia y la coacción» contra los políticos del Partido Popular.
Para Cifuentes, la PAH no es sólo un grupo que está apoyando a las personas desahuciadas, sino que también «está siguiendo una estrategia política bastante radical». «Yo sí creo que hay intereses políticos en todas estas cuestiones, si no que alguien me explique por qué de repente el acoso se centra exclusivamente en políticos del Partido Popular», ha añadido. Una cosa, según ella, es el «drama» de las personas a las que le quitan su vivienda, a las que el Gobierno de Mariano Rajoy, estaría «ayudando con diferentes medidas» y otra «la lucha callejera hasta llegar casi a la kale borroca», dijo sin problemas Cifuentes.
La delegada del Gobierno, nuevamente criminalizando a la PAH, dijo que deseaba que esos supuestos «ataques» terminen porque, a su juicio, es incompatible el derecho de manifestación con el ejercicio «de la violencia y la coacción», algo parecido a lo que deben de pensar las decenas de miles de personas identificadas en cada manifestción que se convoca en Madrid contra los recortes del partido al que representa Cifuentes.