La intensa Granada…

… y Federico García Lorca…
Federico García Lorca – Granada
Granada, calle de Elvira,
donde viven las manolas,
las que se van a la Alhambra,
las tres y las cuatro solas.
Una vestida de verde,
otra de malva, y la otra,
un corselete escocés
con cintas hasta la cola. 
Las que van delante, garzas
la que va detrás, paloma,
abren por las alamedas
muselinas misteriosas.
¡Ay, qué oscura está la Alhambra!
¿Adónde irán las manolas
mientras sufren en la umbría
el surtidor y la rosa?¿Qué galanes las esperan?
¿Bajo qué mirto reposan?
¿Qué manos roban perfumes
a sus dos flores redondas?

Nadie va con ellas, nadie;
dos garzas y una paloma.
Pero en el mundo hay galanes
que se tapan con las hojas.
La catedral ha dejado
bronces que la brisa toma;
El Genil duerme a sus bueyes
y el Dauro a sus mariposas.

La noche viene cargada
con sus colinas de sombra;
una enseña los zapatos
entre volantes de blonda;
la mayor abre sus ojos
y la menor los entorna.

¿Quién serán aquellas tres
de alto pecho y larga cola?
¿Por qué agitan los pañuelos?
¿Adónde irán a estas horas?
Granada, calle de Elvira,
donde viven las manolas,
las que se van a la Alhambra,
las tres y las cuatro solas.

El otro 11-S: en memoria de Salvador Allende

A favor de la democracia
En contra de las dictaduras
Por la libertad individual y colectiva
En contra de la intolerancia

                                    

Antonio Casares (Cantabria, 1946-) ODA A LA LIBERTAD, CANTO A LA TOLERANCIA 
 Yo sueño con un mundo (un mundo que no existe)
en el que todo fuera igual que el primer día, 
cuando todo era un sueño, cuando nada era triste, 
y en las almas reinaba la más bella armonía. 
 
La tierra sería entonces un nuevo paraíso 
donde nunca se oiría la voz de la serpiente. 
Todo aparecería tal como Dios lo quiso: 
puro como el recuerdo de un amor inocente. 
 
A la hora del alba abriríamos los ojos 
para ver cómo nace lo igual y lo diverso, 
ante el dios de la vida nos pondríamos de hinojos 
dándole las gracias por crear el universo. 
 
Allí estaríamos todos unidos por el lazo 
invisible y profundo de la eterna belleza, 
y podríamos sentir el luminoso abrazo 
-maternal y divino- de la Naturaleza. 
 
Abriríamos las puertas de lo desconocido 
para ver el paisaje que sueña a nuestro lado, 
el sol como una rosa del jardín del olvido, 
el mar como un jardín que no hemos olvidado. 
 
Pasaríamos los días olvidando el fracaso 
de vivir en un mundo que no tiene ideales, 
mirando con nostalgia la rosa del ocaso 
o la que brota pura junto a los manantiales. 
 
Seríamos iguales: jóvenes, niños, viejos, 
hermanos inmortales como siempre lo fuimos, 
podríamos mirarnos en todos los espejos 
y vernos como somos, como siempre nos vimos. 
 
Seríamos como dioses y al mismo tiempo humanos, 
no habría para nosotros ni muros ni secretos, 
no existirían esclavos, ni pérfidos tiranos 
que traten a los seres humanos como objetos. 
 
¡Ah, qué sueño más dulce el ver sobre la tierra 
a nuestros semejantes sin muro ni distancia, 
alejados del odio, del mal y de la guerra, 
y de la intransigencia, y de la intolerancia! 
 
¿Por qué levantan muros visibles o invisibles, 
por qué cierran las puertas del mundo y de la vida? 
¿Es que no tienen alma, es que no son sensibles 
a la eterna belleza que a gozar nos convida? 
 
Si negras son las noches, nadie abomina de ellas, 
libre es el mar y nadie lo quiere encadenado. 
¿Por qué el hombre no puede mirarse en las estrellas 
y amar la libertad como nadie la ha amado? 
 
Yo amo la libertad sobre todas las cosas, 
porque ella me da alas para seguir volando 
sobre un mundo mezquino, para mirar las rosas 
del jardín de los sueños, para seguir soñando 
 
con un mundo que sea tal como se desea, 
libre como las alas del pájaro que pasa 
sobre las altas cumbres, con un mundo que sea 
nuestro edén, nuestro hogar, nuestro dios, nuestra casa. 
 
Amo la libertad y la canto y la sueño 
porque quiero que todos la compartan conmigo. 
Es el pan para el alma en la mesa sin dueño, 
es la luz que nos guía en un mundo enemigo. 
 
Deja la flor que juegue el viento en su corola, 
el bosque que la brisa peine su cabellera, 
el hosco mar que el niño se acune con su ola, 
la nieve se deshace por ver la primavera. 
 
Pero el hombre no quiere, el hombre se resiste 
a dejar que los otros gocen de su albedrío, 
y quiere ser el dueño de todo lo que existe 
y mostrar orgulloso todo su poderío. 
 
Presume de ser dueño de todo lo que vive 
y quiere poner yugos en los cuellos ajenos, 
hace leyes injustas, pontifica, prohibe, 
se cree más que los otros y no puede ser menos. 
 
Y yo sufro mirando lo que ocurre, y me pesa 
la vida como piedra que subo a la montaña. 
Me siento como Sísifo a la trágica mesa 
de la muerte insensible que afila su guadaña. 
 
¡Ojalá que esto hubiese sido una pesadilla, 
una visión absurda, un terrible espejismo! 
Pero veo, sin embargo, con horror, cómo brilla 
la guadaña del odio sobre el último abismo. 
 
Hay que mirar el mundo como una despedida, 
porque nada es eterno. Pronto vendrá la muerte 
a segar nuestros sueños, a romper nuestra vida.
Alea iacta est, echada está la suerte. 
 
Pienso en Voltaire, en Locke, en Antonio Machado,
en los que dieron luz a nuestro mundo oscuro.
¿Por qué, ciegos del alma, los hemos olvidado?
¿Construiremos sin ellos el sueño del futuro?
 
Con un pie en el estribo del siglo XXI, 
conciente de que nadie quiere oír al poeta, 
yo pido tolerancia y libertad, que ninguno 
se vuelva a sentir solo sobre nuestro planeta. 
 
Sobre nuestro planeta, el planeta del hombre, 
un mundo que es de todos, aunque no quiere dueño. 
Os hablo con el alma, y os lo pido en nombre 
de un mundo que no existe, pero con el que sueño... 
El último discurso de Allende: http://www.youtube.com/watch?v=g1QJ-y_xUmk
Una canción: http://www.youtube.com/watch?v=u436OUA6phU (Yo pisaré las calles nuevamente, Pablo Milanés y Víctor Manuel)

Un libro: Chile: El Otro 11 de Septiembre.Editado por Pilar Aguilera y Ricardo Fredes. Artículos: Ariel Dorfman, Salvador Allende, Pablo Neruda, Victor Jara, Joan Jara, Beatriz Allende, Fidel Castro, Mario Benedetti.

Una antologia acerca del golpe de estado en Chile por Augusto Pinochet en septiembre de 1973. Incluye un conmovedor ensayo de Ariel Dorfman, las últimos momentos del músico Victor Jara, relatado por su viuda Joan Jara y también incluye resonantes discursos de Beatriz Allende, hija del presidente, y de Fidel Castro.

 

«Es posible que nos aplasten. ¡Pero el
mañana será del pueblo!»

 Salvador Allende

¿Se puede ser más ruin y miserable? Parte II


(… continuación)
[primero hay que leer el post anterior]P.- ETA intenta asesinarle
antes de ser presidente del Gobierno, después secuestra a Ortega Lara y mata a
Miguel Angel Blanco. ¿Cómo se afronta eso?

R.- La reacción de ETA y de
su entorno era intentar ponérmelo casi imposible, ya que no habían conseguido
acabar conmigo. Lo de Ortega Lara para nosotros se convirtió casi en una
obsesión. Liberarle era un desafío que vivíamos intensamente todos los días. Su
liberación fue un golpe terrible para ETA. Le habíamos dicho claramente a ETA
que no íbamos a negociar ni a hablar. Yo quería acabar con los terroristas. Cuando secuestran a Miguel Angel Blanco hay una cosa
muy clara, que ETA puede ser derrotada, pero su derrota es la derrota del
nacionalismo, y por tanto el nacionalismo pone en marcha un mecanismo para
boicotear ese movimiento cívico, el espíritu de Ermua
.

P.- En resumen, que el PNV
contribuye a que fracase el espíritu de Ermua.

R.- Yo creo que el nacionalismo nunca ha querido la derrota de ETA.
Y quien piense que la quiere se equivoca. El PNV no quiere la derrota de ETA,
quiere la derrota de España a través de una negociación con ETA.

P.- Menuda responsabilidad
que la vida de un hombre dependa de una decisión. ¿Tuvo alguna duda sobre su
posición durante el secuestro de Miguel Angel Blanco?

R.- No tuve ninguna duda, y
además así se lo dije a la familia de Miguel Angel. Fue durísimo, pero no
podíamos ceder al chantaje. Moví Roma con Santiago para intentar encontrarlo,
pero ya sabíamos que la orden de asesinarle estaba dada desde el momento del
secuestro. Lo que ETA buscaba era conseguir ventaja. Si hubiéramos cedido al
chantaje, habríamos tenido que soportar muchos chantajes más y habría empeorado
muchísimo la lucha contra el terrorismo.

P.- Acláreme una cosa. Que
usted usara la expresión de MLNV, ¿fue una exigencia de ETA durante la tregua?

R.- En absoluto. Nadie me
puso lo del MLNV en la boca. Ni ETA lo exigió ni yo lo habría aceptado. El MLNV es su gran concepto y existe. Por eso el PNV
no quiere la derrota de ETA. Todo el nacionalismo, al final, forma un gran
movimiento, y eso es el MLNV
. Es la financiación, los medios de
comunicación, los grupos institucionales, Batasuna, los comandos de ETA y una
parte del PNV… Eso es el Movimiento de Liberación Nacional Vasco, todo ese
entramado.

P.- Admita que todos los
gobiernos han hablado con ETA de una u otra forma, y usted también, sin que se
le demonizara como a Zapatero.

R.- Pero yo no negocié ninguna tregua. Lo que yo hice no
tiene nada que ver con lo que ha hecho el Gobierno de Zapatero.

De hecho, el pacto de Estella surge porque nosotros rechazamos toda negociación
con ETA. Yo ni negocié ninguna tregua ni pacté ninguna tregua ni estuve
dispuesto a aceptar condiciones de nadie. Nosotros sólo estábamos en un combate
directo con ETA, y cuando se habló de una tregua nos reunimos con ellos sólo
para ver si dejaban las armas definitivamente o no. Nuestra respuesta con el
Pacto Antiterrorista fue de absoluta firmeza, de no darles un respiro, y a día
de hoy sigo pensando que asfixiarles de todas las maneras es la única forma de
acabar con ellos.

P.- Permítame una curiosidad.
¿Cuántas veces se ha arrepentido de la famosa foto de las Azores?

R.- Por mucho que algunos se
empecinen, yo nunca me voy a
arrepentir de la foto de las Azores. No me arrepentiré jamás de que España
estuviera en una foto entre las dos democracias más importantes del mundo
asumiendo sus responsabilidades en un momento difícil
. No me
arrepiento en absoluto, porque fue el momento histórico más importante que ha
tenido España en 200 años.

 P.- Pues eso y su
empecinamiento con la Guerra
de Irak le costó las elecciones a su partido.

R.- Eso no es verdad, y los
hechos lo prueban. Después de la intervención en Irak hubo unas elecciones
municipales y autonómicas, y los resultados para el PP fueron excelentes. Aquí quien se ha ido de rositas es el PSOE, y esa
izquierda radical que se pasó la jornada de reflexión golpeando, asaltando,
persiguiendo y destruyendo a la gente del PP
. Escuchar que
algunos pretendan darnos lecciones de democracia al PP cuando ellos hicieron lo
que hicieron, es un sarcasmo.

P.- Tal vez si usted el 11-M
hubiera llamado a Zapatero y le hubiera convocado a La
Moncloa, las cosas hubieran ido de otra manera.

R.- Es que yo llamé al PSOE y
llamé a todo el mundo. Lo que ocurre es que en un momento determinado, la
izquierda española decide usar eso en contra del Gobierno, entraron en la
dinámica del todo vale como habían hecho en otras ocasiones. Fue la primera vez en la
Historia que a un Gobierno se le hace responsable de un
atentado, y no a los terroristas. Estoy seguro de que el PSOE tarde o temprano
pagará un precio por su actitud y que no le saldrá gratis esa tremenda
deslealtad.

P.- Hombre, admita que el
11-M todo se complica cuando ustedes culpan a ETA y no a los islamistas.
¿Cometieron errores?

R.- Claro que cometimos
errores. Todo el mundo los puede cometer. Pero cuando nosotros decimos que el
atentado es imputable a ETA es porque tenemos todos los servicios de
inteligencia de España y del mundo que nos dicen que ha sido ETA. Ni intentamos
mentir ni nuestra posición era una triquiñuela partidista.

¿Se puede ser más ruin y miserable? Parte I

No, no se puede ser más ruin y miserable que este personaje que tuvimos que sufrir durante 8 interminables años como Presidente del Gobierno español con sus mentiras, sus engaños, sus locuras, sus aires de grandeza, su prepotencia, su favoritismo a los que más tienen, sus miserias, sus ataques a los que afortunadamente no pensamos como él y no somos como él (sí, Sr. Aznar, yo soy uno de esos terroristas perteneciente a la izquierda más radical de este país -según usted- que no comparte sus opiniones, y bien orgulloso que estoy), que seguimos sufriendo cada dos por tres cuando aparece en los medios, y que seguiremos sufriendo continuamente cuando, ávido de protagonismo y hambriento de popularidad, escupa por su boca sandeces, mentiras, injusticias, incongruencias y estupideces como las que aparecen en la entrevista concedida a El Mundo recientemente (¡cómo no!, ¿dónde si no podrían estar interesados en sus locuras?).

La entrevista (en dos posts porque en uno no me deja publicarlo) no tiene desperdicio. Y la fotografía que incluye la entrevista, tampoco… Me produce rabia, impotencia, malestar general, ganas de gritarle… ¡Cuánta locura, prepotencia y arrogancia habita en las cabezas de algunos!…

Agosto 28, 2008…7:43 pm, El Mundo

Entrevista con José María Aznar en “El Mundo”

http://www.elmundo.es/elmundo/2008/08/27/espana/1219870153.html

PROTAGONISTAS DE 30 AÑOS DE DEMOCRACIA

Aznar: ‘Dejé como herencia el país más rico de la historia de España’

  • ‘La Constitución está siendo gravemente vulnerada con la complicidad del Gobierno’

  • ‘Ni negocié ninguna tregua con ETA, ni estuve dispuesto a aceptar condiciones’
  • ‘Claro que cometimos errores en el 11-M, pero no intentamos mentir’


«El PSOE pagará su deslealtad en el 11-M»

Presidente del Gobierno entre 1996 y 2004, logró que la economía española alcanzara una fuerza considerable. Optó por no presentarse a un tercer mandato y, antes de su retirada, tuvo que hacer frente al 11-M, el peor atentado de la Historia de España, que costó las elecciones al PP tres días después. Ahora preside la Faes y en el último congreso del partido ha mostrado sus diferencias con Rajoy.

ESTHER ESTEBAN

Pregunta.- La Constitución Española cumple 30 años. ¿En qué nos hemos equivocado y en qué hemos acertado?
Respuesta.- Tenemos más aciertos que equivocaciones. La doble transición de una dictadura a una democracia, y de un país semidesarrollado a un país próspero, más la presencia y normalización internacional de España, son las tres cuestiones más relevantes. En esos 30 años ha habido muchos desafíos, y buenos y malos momentos. Reconocer la pluralidad de España y organizar el estado autonómico fue un acierto, pero no saber ponerle límites a esa configuración territorial es el mayor error que se ha cometido.

P.- Fraga metió a la derecha española en el redil democrático, pero ustedes apenas han conseguido gobernar ocho años, siempre bajo la sospecha del franquismo. ¿Por qué?

R.- Pues probablemente por la actitud de la izquierda de intentar deslegitimar políticamente a la derecha española, de imputarle un pecado original como herederos del franquismo que nosotros siempre rechazamos y de intentar crear lo que modernamente se han llamado cordones sanitarios. Es decir, organizar las cosas de tal manera que el hecho de que la derecha española pudiera gobernar fuera excepcional, de tal forma que, si ganaba, gestionase su herencia sin modificar las cosas, y al cabo de pocos años se volviera a la normalidad, que para ellos es un gobierno socialista. Eso ha sido siempre una tradición del PSOE, lo hizo ya en la República y lo ha hecho ahora intentando crear esas barreras para impedir las alternativas democráticas en España.

P.- En 1990, usted tiene claro que hay que hacer un profundo cambio generacional en el PP. ¿Qué dificultades encuentra para hacerlo?

R.- La derecha española hace una cosa bien, que es la Transición democrática. Eso no podría haberse hecho sin el protagonismo de la UCD. El siguiente paso fue articular una derecha popular, y eso es lo que hace Fraga, que extiende las bases de la derecha, pero es una derecha perdedora. Después de varias crisis y del gran cambio que se produce, es cuando nace el PP, en el 89, y se convierte en una derecha homologable a cualquier derecha de Europa, una derecha ganadora, unida y con una fuerza de convicciones internas muy grande. Y eso ha funcionado bien hasta ahora.

P.- Con su llegada a La Moncloa se rompe el maleficio de que la derecha no puede gobernar España. ¿Había un miedo real a que ustedes gobernaran?

R.- Ahí se produce el hecho natural de la alternancia democrática. Que gobernase el PP era un factor de normalidad democrática que superaba viejos recelos. Había tópicos, con campañas absurdas como que el PP iba a quitar las pensiones, cerrar los hospitales, etcétera. Todas esas cosas de las que, en gran medida, sigue viviendo la izquierda, porque tiene poco que ofrecer.

P.- ¿Cómo fueron los primeros momentos de traspaso de poder teniendo en cuenta que sus relaciones con los socialistas eran muy malas?

R.- La herencia que yo recibo es muy mala. Consistente en una inflación al 6%, un déficit público del 7%, un desempleo del 24%, la Seguridad Social en suspensión de pagos, un endeudamiento muy preocupante, un desequilibrio externo enorme y además sin cumplir ninguno de los requisitos de Europa. Recibí esto, y dejé como herencia el país más rico de la Historia de España. Eso no fue nada fácil. Desde el punto de vista formal, yo tuve un par de conversaciones con mi predecesor, sin mayor trascendencia; y desde el punto de vista de lo que significa la entrega de los dossieres, documentos o asuntos pendientes, no recibí nada.

P.- ¿Se llegó a ver a solas con Felipe González? Porque él le despreciaba.

R.- Tuve un almuerzo con él que convocó Adolfo Suárez en un intento de mediación. González no me apreciaba, pero eso fue un problema para él, no para mí. Durante el año en que él fue jefe de la oposición, hablamos varias veces sobre la entrada de España en la estructura militar de la OTAN, y él lo aceptó porque estaba arrepentido de haber hecho el referéndum.

P.- El hecho de que usted no levantara alfombras después de Filesa, el GAL, Roldán, etcétera, ¿fue un acierto o un error?

R.- Lo dije desde el principio, que prefería abrir las ventanas que levantar las alfombras. No llegábamos al Gobierno para revisar el pasado sino para construir el futuro. Veníamos a cambiar las cosas, y las cambiamos.

P.- Una cuestión decisiva es que usted consigue pactar con los nacionalistas, con Pujol y Arzalluz, algo que parecía imposible.

R.- Antes de ganar yo había tenido muchas conversaciones con ellos, y aunque con profundas discrepancias, esas relaciones eran bastante normales y francas -más con CiU que con el PNV-. Cuando ganamos en el 96, las presiones eran muy fuertes, porque había una operación en toda regla para impedir que el PP llegara al poder, con entresijos muy profundos que en algún momento se sabrán.

P.- ¿Cómo cuáles? ¿A qué entresijos se refiere?

R.- Le digo que con el tiempo se podrán saber, todavía no. El hecho es que encargué a Rato las conversaciones con CiU, y a Mayor Oreja, con el PNV. Con la única condición de que los acuerdos fueran públicos y transparentes, y lógicamente que no afectaran a la esencia del proyecto del PP. Se trataba de que se produjese un hecho nuevo, de normalización democrática, donde la derecha española podía pactar con los nacionalismos sin que nada se resquebrajase. El resultado de eso fue un proyecto de más España.

P.- ¿Qué significó el pacto del Majestic? ¿Confiaba en que podía cerrar el modelo autonómico?

R.- Mi relación con Pujol fue muy buena, de respeto y lealtad. Le dije que todo el desarrollo autonómico llega un momento en que tiene un límite. Sabía que los nacionalistas, tarde o temprano, tendrían que elegir entre transgredir el límite o mantener la lealtad constitucional. Y, sinceramente, creo que hice todos los esfuerzos posibles para que estuvieran en la lealtad constitucional. Desgraciadamente, las cosas no fueron así. El caso del PNV fue diferente, porque había suscrito con ETA el pacto de Estella, y eso fue un desafío muy grande. Su deriva soberanista era muy clara y su deslealtad, también. Pasados los años se ha visto que el régimen constitucional del 78 ha durado hasta 2004. Cuando se intenta modificar la Constitución por la puerta de atrás, con la complicidad del Gobierno, podemos entender que la Constitución del 78 está siendo gravemente vulnerada.

P.- ¿Usted consideró en ese momento a Pujol más hombre de Estado que a Arzalluz?

R.- Hay diferencias entre ambos, evidentemente. Tuve una relación muy franca con los dos. Ambos sabían cuál era mi pensamiento, y se dieron cuenta desde el principio de que yo no iba a aceptar una vulneración constitucional. Tuve más reuniones con Pujol que con Arzalluz. No puedo decir que tenga una relación de amistad con el ex presidente de la Generalitat, pero sí de confianza política y de respeto mutuo. Creo que ha sido uno de los grandes políticos de esta etapa constitucional, aunque tenga con él grandes discrepancias.